La Comisión Europea ha propuesta aplazar de nuevo y un año más, esta vez hasta el 1 de enero de 2022, la entrada en vigor de la normativa sobre producción ecológica cuyo objetivo es hacer que el 25 por ciento de la superficie agraria de los Estados miembros sea orgánica.
Esta normativa busca simplificar las normas gracias a la supresión progresiva de una serie de excepciones y exclusiones; se refuerza el sistema de control mediante medidas preventivas más estrictas y controles rigurosos a lo largo de toda la cadena de suministro; los productores de países no pertenecientes a la Unión Europea tendrán que cumplir las mismas normas que los productores europeos; se extenderá la aplicación de las normas a una lista más amplia de productos, entre ellos, por ejemplo, la sal.
La certificación será más fácil para los pequeños agricultores gracias a un nuevo sistema de certificación en grupo y se adoptará un enfoque más uniforme para reducir el riesgo de contaminación accidental por plaguicidas.
La norma aprobada en junio de 2018, establece las condiciones para el cultivo de algas y cría acuícola de animales. A diferencia de la agricultura ecológica, en acuicultura se trata de una actividad nueva, por lo que a medida que se vayan produciendo las conversiones de convencional a ecológico se generarán nuevas experiencias, conocimientos técnicos y avances en pro de la acuicultura ecológica que deben reflejarse en las normas de producción.
Dentro de la actividad ecológica no se permitirán aquellos productos que provengan de la destrucción de manglares. El periodo de reconversión para la recolección y cultivo de algas será de seis meses. La recolección de algas silvestres se considerará ecológica siempre que procedan de una zona clasificada como A y B desde el punto de vista sanitario y la actividad no afecte significativamente a la estabilidad del ecosistema o al mantenimiento de las especies en la zona de recolección.
La normativa permite el cultivo de algas de sistemas de acuicultura animal siempre que proceda de sistemas de policultivo ecológicos.
En el caso de los animales ecológicos de acuicultura, el periodo de reconversión de las explotaciones será de 24 meses en aquellas instalaciones que no puedan vaciarse de agua; de 12 meses para las que se hayan vaciado de agua y de animales; y de 6 meses para las instalaciones que se hayan vaciado, limpiado y desinfectado. Para las instalaciones en aguas abiertas, incluidas las que producen moluscos bivalvos, el periodo de conversión será de 3 meses.
En lo que respecta a los peces, no podrán usarse hormonas ni derivados de estas para la reproducción y no se recurrirá a la producción artificial de estirpes de un solo sexo, salvo por selección natural, ni a la inducción de poliploidia, ni a la hibridación artificial, ni a la clonación. Se elegirán estirpes adecuadas.
La Comisión, además, ha puesto en marcha la semana pasada una consulta pública sobre el futuro plan de acción sobre Agricultura Ecológica, enmarcado en el Pacto Verde Europeo. La encuesta estará online hasta diciembre de 2020 y su objetivo es conocer la opinión de la ciudadanía, las autoridades nacionales y las partes interesadas sobre la producción ecológica.
Fuente: Mis Peces