Los barcos pesqueros extranjeros ahora deberán contar con equipos de rastreo satelital para ingresar a los puertos peruanos, según una nueva medida aprobada por el Ministerio de Producción del país (Produce).
En los últimos cinco años, Perú ha perdido unos 425 millones de dólares por la pesca ilegal de calamar en sus aguas, informó en un comunicado el Comité de Pesca y Acuicultura de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) del país.
El nuevo presidente del comité, Alfonso Miranda Eyzaguirre, agregó que la decisión «permitirá a Perú combatir efectivamente la pesca ilegal», especialmente del calamar gigante, el segundo recurso marino más importante de Perú después de la anchoveta.
Al respecto, Miranda destacó que la medida ahora obliga a las embarcaciones extranjeras que deseen ingresar a puertos peruanos para reparaciones, transbordos o aprovisionamientos, a contar con un sistema de rastreo satelital (SISESAT) compatible con el sistema de Produce.
De esa manera se puede verificar si los barcos pescaron ilegalmente en aguas peruanas.
Undercurrent News informó anteriormente que los barcos chinos que pescan cerca de las Islas Galápagos de Ecuador pueden estar apagando sus sistemas de identificación automática (AIS) basados en satélites y utilizando «barcos gemelos» para ingresar a la zona económica exclusiva ecuatoriana (ZEE). Es probable que algo similar esté sucediendo en aguas peruanas, según fuentes de la industria pesquera.
Miranda dijo a Undercurrent que la pesquería ilegal descubierta recientemente en Galápagos ha ocurrido «todos los años» durante los últimos años en el «circuito de calamar» sudamericano, que va desde la costa argentina, en el Atlántico Sur, pasando por el Estrecho de Magallanes, hasta la costa de Chile, Perú y Ecuador.
«Esto no es una novedad, es un hecho permanente y ha ido creciendo», dijo Miranda a Undercurrent , y agregó que en muchos casos, las flotas asiáticas que pescan en aguas internacionales fuera de las ZEE de América del Sur se benefician de los subsidios gubernamentales para combustible y mano de obra barata.
«Hay más de 500 embarcaciones que siguen la ruta del calamar, entre Argentina, Chile, Perú y Ecuador», apuntó, destacando que la pesca ilegal de calamar ha estado dañando seriamente toda la cadena productiva en el Perú, desde los pescadores artesanales hasta el procesamiento de plantas.
Miranda enfatizó que el sector pesquero peruano había estado solicitando al gobierno que introdujera tales medidas durante los últimos cuatro años. Más precisamente, el reglamento publicado el 27 de agosto en el diario El Peruano indica que las embarcaciones de bandera extranjera que arriben a los puertos peruanos, deben cumplir con las siguientes condiciones:
a) El pabellón del barco pesquero debe ser miembro o participante obligado de las organizaciones regionales de ordenación pesquera (OROP) pertinentes. b) El buque pesquero debe estar autorizado para operar dentro del ámbito de dichas organizaciones regionales de ordenación pesquera (OROP) pertinentes.
b) El buque pesquero debe estar autorizado para operar dentro del ámbito de dichas organizaciones regionales, si corresponde.
c) El barco no debe aparecer en una lista de barcos que hayan incurrido en actividades de pesca ilegales, no declaradas y no reglamentadas de cualquier OROP.
d) En el caso de buques pesqueros de pabellón extranjero que realicen actividades de pesca de recursos hidrobiológicos transzonales o transfronterizos en alta mar, deberán tener operativo el SISESAT de Produce y transmitir a su centro de control, su posicionamiento satelital de los últimos seis meses antes de su informe de entrada.
Miranda elogió los esfuerzos del gobierno para aprobar las nuevas reglas y señaló que la pesca y la acuicultura peruana para consumo humano están listas para crecer, una vez que se supere la crisis de salud del COVID-19.
Fuente: Undercurrent News