La expectación ante lo que pueda suceder en torno al brexit pesquero es máxima. El próximo lunes se reanudan las conversaciones entre los equipos negociadores de la UE y el Reino Unido y habrá rondas de contactos durante todo el mes de julio y la primera semana de agosto. El mandato de la negociación, el mismo que indica que no habrá acuerdo comercial general sin un acuerdo pesquero previo, establece que las relaciones pesqueras se deben pactar antes del 1 de julio.
Pero el sector pesquero europeo, a través de la EUFA, la Alianza Pesquera Europea, da por hecho que no será así. El presidente de la asociación, que reúne a las principales organizaciones pesqueras de la UE afectadas por la salida del Reino Unido de la EU, Gerard van Balsfoort, indicó en su intervención en la jornada técnica de Expomar que no cuenta con un acuerdo pesquero antes de octubre ya que la distancia entre los negociadores, unida a las dificultades para llevar a cabo las negociaciones debido a la COVID-19, impedirán alcanzar en el plazo marcado un acuerdo que, insistió, interesa a las dos partes. “No habrá acuerdo ni en julio ni en agosto, quizá en octubre”, aseguró. Lo que sí tiene claro es que las próximas semanas serán fundamentales y los esfuerzos se centrarán en las mesas de negociación más complejas. Entre ellas la pesca. “Ahora estamos en la calma antes de la tormenta”, dijo en una intervención desde Países Bajos.
Gerard van Balsfoort se mostró tranquilo con relación a la postura de la UE. El sector ha logrado que la pesca sea una prioridad en las negociaciones, dijo, y la UE se mantiene firme en la defensa de las condiciones del acceso recíproco; el reparto de cuotas y la puesta en valor de la actividad histórica que realiza la flota europea en las aguas nacionales del Reino Unido, que quedarán fuera de la PPC el próximo mes de enero. Es la postura que ha vendido defendiendo el sector europeo desde el inicio de este proceso, que cumple ahora cuatro años: el statu quo. Sin embargo, el mandato del Reino Unido es diferente. “Quieren negociaciones bilaterales anuales sobre acceso y reparto de cuotas. El Reino Unido rechaza la estabilidad relativa y defiende una nueva metodología, basada en la vinculación zonal. Lo que es muy negativo para para nosotros”, resumió el presidente de la EUFA, que cree que las posturas entre ambas partes está a 180 º de separación. “No hay convergencia”. Mientras el Reino Unido defiende una negociación anual, Europa y su sector abogan por estabilidad y a largo plazo. “El acuerdo debe ser al menos a 25 años”, según indicó el portavoz de la EUFA.
Tras cuatro rondas de negociaciones, afectadas directamente por la COVID19, los progresos han sido nulos, y el Primer Ministro británico, Boris Johnson ya ha subrayado que no habrá otra prórroga. Sin embargo, el sector europeo se apoya en el compromiso de los negociadores comunitarios, liderados con Michel Barnier, y el de los propios ministros de Pesca a través del Consejo Europeo. “El juego comienza la semana que viene ¿Qué podemos esperar? no lo sé, pero una condición esencial para la UE es la vinculación entre los pesca y acuerdo comercial”, insistió el holandés, que destacó que “estamos en la fase crítica”.
LA PESCA NO ES EL PRINCIPAL ESCOLLO
El presidente de la EUFA quiso dejar claro en su intervención que la pesca no es el principal escollo que está bloqueando el acuerdo entre la EU y el Reino Unido, a pesar de que sea una idea que generalizada. “Es algo que no tiene sentido, hay asuntos más importantes que pesca, con mayor valor económico importante. Como los intereses de ciudadanos. Nadie puede convencerme de que la pesca es el gran problema”, aseguró.
Fuente: Industrias Pesqueras