Aunque los últimos datos son relativamente positivos y apuntan hacia una recuperación del consumo de productos del mar, la caída del mercado ha sido uno de los efectos directos de la crisis de la COVID-19 en la pesca. Con el cierre del canal Horeca, la pesca ha perdido un importante canal de comercialización y en los hogares, donde el consumo es sostenido, el cambio de hábitos ha alterado durante estas últimas semanas de “estado de alarma” los porcentajes de ventas de frescos, congelados y conservas.
Ante esta situación, y con la necesidad de reforzar el consumo de productos pesqueros nacionales y poner en valor el trabajo desarrollado por la pesca en este periodo, y su compromiso con el abastecimiento de pescado, el sector ha venido reclamando al Gobierno una nueva campaña institucional de fomento del consumo. Llegará a partir del próximo 5 de mayo, según indicó el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, al sector en la reunión mantenida a comienzos de esta semana con diferentes organizaciones de la pesca.
Fuente: Industrias Pesqueras